El maquetismo, como toda actividad cultural y social está regido por una serie de convenciones que la mayoría acepta de forma más o menos inconsciente. En caso de no saber a lo que me refiero con convención, una convención es una ‘norma o práctica admitida por responder a precedentes o a la costumbre’. En este sentido, muchas de las prácticas del maquetismo que nacen de forma natural, son convenciones. Por ejemplo, el utilizar pintura diluida (de cualquier tipo) para remarcar las líneas de los paneles de una maqueta es una convención más o menos aceptada que busca representar de forma relativamente adecuada el efecto visual que estas tienen en un avión real. Todos sabemos que los mecánicos no pintan la separación entre paneles de un avión real en negro, pero aceptamos en el maquetismo esta técnica (no única) de imitar la realidad. De la misma forma, el uso de pincel seco también es una convención que utilizamos para representar el relieve. Creo que ya se entiende la idea, pero para cerrarla en palabras sencillas, todas las técnicas estandarizadas del maquetismo son parte de sus convenciones y en su conjunto conforman la disciplina.
Detrás de esto no hay nada más que la necesidad de hacer un ejercicio mental para entender lo que hacemos y diferenciarnos de otros pasatiempos. Y por supuesto hay quienes se salen de la ‘norma’. No hay nada malo en esto y no tienen un fin oscuro de dominación mundial. El problema, si es que existe alguno, es que los maquetistas tendemos a encasillarnos y enceguecernos en las convenciones, algunas veces de forma tan obstinada que personajes y productos son endiosados. Tanto la obsesión por la búsqueda del color perfecto, como la flojera al no mezclar dos o más pinturas para obtenerlo son perjudiciales. Por un lado, esperamos que los fabricantes nos provean con el color exacto y si parece discrepar de la convención, muchos reclaman ante semejante error. Por otro lado, creemos ciegamente en la etiqueta de algunos productos y los adoptamos como uno de los diez mandamientos. Situaciones similares se encuentran en presombrear y panelear aviones para que parezcan animaciones 3D de videojuegos o el dogma de la modulación para blindados. Todas estas son convenciones no son únicas.
Si un blindado o avión se modula o prepanelea, ¿se han preguntado por qué razón los maquetistas de autos a escala (‘civiles’) no lo hacen? Simplemente porque la pintura brillante otorga suficientes luces y sombras para lograr los cambios de tonos del vehículo real, cosa que la pintura opaca no logra. Claro que hay efectos de desgaste, tierra y barro… ¿Pero acaso sus autos no se ensucian ni sufren las inclemencias del clima? Un tanque o avión se pinta frecuentemente como parte de su mantención. El auto de la familia no se repinta a no ser que haya ocurrido un accidente o se quiera restaurar. De nuevo, convenciones sobre como representar la realidad difieren entre distintos temas de maquetismo.
Solo para aclarar (muchos parecen no entender lo que leen): No estoy en desacuerdo con el presombreado, modulación o colores perfecto, mi punto es que son solo convenciones y como individuos maquetistas libres podemos elegir aceptarlas o no. Como todo en nuestras sociedades, las convenciones son reproducidas y preservadas porque fabricantes y maquetistas ‘estrellas’ las promocionan. El maquetismo no está exento de usos y abusos de poder que vemos en política u otros componentes de la sociedad. Nosotros podemos aceptar lo que dice la etiqueta o el paso a paso del libro de 40 euros y usarlo como una mera referencia o como las sagradas escrituras (de cualquier religión). Mi llamado es a ser un poco más rebeldes y escépticos, a la vez que menos flojos, y volver a experimentar como cuando hacíamos las primeas maquetas de niños o cuando no teníamos la posibilidad de usar 6 colores para la modulación del verde oliva. Mezclen pinturas, prueben distintas técnicas, critiquen constructivamente el trabajo de otros y no endiosen maquetistas y marcas solo porque tienen etiquetas elegantes, son buenos con el Photoshop e imprimen publicaciones en papel cuché.
Falta ser un poco más directos, esas “estrellas del modelismo” que mencionas son MiG Jimenez y dos españoles más que se han hecho conocidos en este último par de años por sus técnicas de temporizado, productos y publicaciones relacionadas. Personalmente no me gustan sus trabajos. El temporizado, que incluye pre y post-sombreado son utilizados de tal manera que los aviones acaban terriblemente panelizados. Entiendo que cada quien arma como mejor le parece. Pero y de hecho cada trabajo de ellos merece respeto pero de ahí a tomarlos como convencion del buen armado… no, no hay manera, sin embargo me sorprende la cantidad de gente que adopta sus practicas como ley. Esta tendencia empieza a ser bautizada como “estilo español” en algunas conunidades de modelismo y junto con ello empiezan a aparecer las críticas. Yo creo que sus técnicas y productos quedan mejor en blindados, yo armo aviones. Esa es mi opinión.
Gracias por tu comentario Ed. Quiero volver a aclarar que yo no culpo a nadie (como maquetista o fabricante), si no que a los maquetistas que se dejan influenciar facilmente. Claro que hay tecnicas y estilos que son de gusto de algunos pero pueden perfectamente no gustar a otros. Cada uno es libre de seguir sus propias ideas, visiones e interpretaciones de lo que se busca reemplazar
Yo sigo usando las viejas técnicas de los pasteles betún y oleos, no hago prepintado ni pospintado evejezco el modelo con lo antes mencionado y me encanta como quedan
Es verdad lo que dices, todos están en su derecho de hacer la maqueta como quieran, y puedes encontrar distintas clases los maquetistas los cuales reciclan productos u otras cosas para lograr efectos ya que no tienen la posibilidad de comprar los productos listos, tb tenemos lo yoyo , yo compre este producto que es un extracto del original que usaron el 25 de julio de 1942, por la tarde justo después del almuerzo, y es super exclusivo, solo venden fuera y se me olvido donde, están los que no están ahí, a sus ojos la maqueta luce igual que el original, dejando a un lado que el tipo es daltonico, pero en fin es feliz, los de moda obvio, primero la tierra de color, luego los lapices pasteles y ahora los pigmentos, luego están los que si la maqueta esta bien carreteada incluso a sabiendas de que las orugas se están deshaciendo por el oxido, del caso contrario no ha estado en combate, yo me considero de los que tienen que tener los justo y necesario, el único lugar donde un vehículo esta impecable es cuando recién sale de la fabrica, pero nunca puede existir un vehículo tan “guedereado” que este activo XD, y peco de ocupar las novedades MIG o Vallejo , ya que este ultimo año que retome el hobby me di cuenta que son super cómodos para uno que anda con el tiempo contado.
Y también creo en la critica constructiva, y me carga sobar el lomo, decir esta bonito si no lo esta, lo encuentro un engaño y no una cortesía, me he dado cuenta la veces que he dicho algo en foros extranjeros las criticas son bien recibidas, a diferencia de mi país, que casi es como que si le estuvieras sacando la madre
Estoy de acuerdo en el planteamiento del articulo. Personalmente hace años pase la fiebre y deje de preocuparme por el “color exacto” o porque el kit ya esta viejo y no es un multi-media reloaded, etc.
Mucha gente en el modelista (sobre todos la generación reciente de finales de los 90’s para aca) olvida o no se entero que lo importante ademas del disfrute del armado y creación básicos esta en lograr al final que el modelo se “parezca” a lo real y no que “sea” real.
Creo que de alli viene esa critica extrema a todo MODELO que no tenga un baño total de los últimos productos del mercado o como no se te ocurrió usar tal técnica. etc. Tal vez se cree que solo así es mas valido el trabajo de recreacion de la realidad del modelo.
Por supuesto que siempre estoy pendiente de las nuevas técnicas y productos pero esto definitivamente no me quita el sueño.
Al final, debemos igual reflexionar que esta es mi opinión, que es afín con la tuya pero son tan validas como la opinión del que defiende lo contrario.
Así que cada quien a disfrutar del modelismo plastico a su manera y no preocuparnos tanto por los demás, cada quien a su manera.
100% de acuerdo, los fundamentalismos maquetísticos son bastante comunes lamentablemente. Agregaría la obsesión de creer que todos los colores están en Humbrol o ModelMaster, como si los militares/aerolíneas comerciales estuvieran con el FS595 a la mano. Por otro lado, queda claro -al menos eso creo, fundamentalísticamente hablando- que lo de las pinturitas es obviamente un lucrativo negocio (no merezco el Nobel por semejante descubrimiento): para el cockpit del A-4 Skyhawk de Airfix hay que usar -según el manual- como 10 pinturas diferentes…chaleco salvavidas, traje de vuelo, casco, asiento, respaldo de asiento, gafas y botas, además del color de la “bañera”, Para eso, mejor investigar y sacar los colores mezclándolos uno mismo…algo que mucho maquetista no sabe o no quiere hacer, por flojera.